Proyectos de aprendizaje: Una poderosa herramienta
junio 16, 2022
El aprendizaje a través de proyectos promueve la participación, colaboración e interacción entre los estudiantes, los contenidos y el docente.
El aprendizaje de los alumnos puede ser producto de la práctica de diversas modalidades de enseñanza. Actualmente, el aprendizaje basado en proyectos se ha difundido en una gran cantidad de escuelas debido a las ventajas que ofrece a los estudiantes. La UNICEF en Buenos Aires, Argentina, con el apoyo de Xavier de Aragay, desarrolló una propuesta que expone las razones por las que los proyectos para aprender son más que una moda.
¿Cómo son los proyectos en Colegio Monclair?
Los proyectos que se planean y desarrollan en Colegio Monclair son interdisciplinarios, activos, colaborativos y relacionados con aspectos de la vida real. Estas cuatro características de los proyectos que desarrollamos en el colegio se apegan a la forma en la que son concebidos de manera internacional como PLaNEA, la Nueva escuela para adolescentes, promovido por la UNICEF.
“Plantea como eje central la participación activa de los estudiantes en el proceso de aprendizaje a partir de actividades que involucran la resolución de problemas auténticos que les exigen tomar decisiones, indagar en diversas fuentes y poner en relación diversos contenidos, saberes y lenguajes. La iniciativa busca que los alumnos desarrollen capacidades acordes con el mundo contemporáneo, para lo cual promueve el trabajo en proyectos colaborativos que, además de formarlos intelectualmente, los motivan, los desafían y permiten el desarrollo de habilidades para la vida”.¹
El aspecto interdisciplinario consiste en que las asignaturas no sean bloques de conocimientos aislados entre sí. Cada parte de esos conocimientos se va integrando y se va incorporando al conjunto de conocimientos previos de cada alumno. Esta característica de los proyectos supera la antigua manera de dividir el día en horas, en las que de manera separada las personas “aprendían” algo y llegado el final de cada materia se iniciaba un nuevo procedimiento para aprender otros contenidos que poco o nada tenían que ver con el material anterior.
Los proyectos que ponemos en práctica en Colegio Monclair son activos, debido a que son los alumnos quienes deben ejecutar las tareas, las misiones, los ejercicios necesarios para lograr el aprendizaje.
Aquellos alumnos pasivos que para aprender algo debían escuchar al profesor solamente y luego pasar apuntes y memorizarlos, tienen menos posibilidades de lograr la cantidad y calidad de aprendizajes que los que realizan conjuntos de actividades y desarrollan series de procesos relacionados con el acopio, sistematización y manipulación de datos.
Los proyectos en Monclair plantean series de actividades para que los alumnos participen directamente en ellas, ya sea al obtener, producir, procesar, difundir, contrastar y/o verificar información para resolver problemas, crear soluciones, proponer alternativas de actuación, desde cuestionamientos, planteamiento de problemas, descubrimiento de vacíos o hallazgos. Los estudiantes en los proyectos asumen un rol protagónico en la construcción de su aprendizaje, descubren procesos y producen soluciones adecuadas al contexto del problema.
Las competencias que requieren las personas para ser ciudadanos, para vivir en el mundo actual son adquiridas y ejercitadas en el desarrollo de los proyectos, en cuanto a la socialización y participación activa del sujeto. Esto ocurre en oposición a la sistematización individual, rutinaria de escuchar información emitida por el profesor, para procesarla mediante la repetición y la memorización y, así, eventualmente evocarla y rara vez aplicarla.
La práctica del aprendizaje colaborativo enriquece nuestra concepción del Aprendizaje Basado en Proyectos. La concepción del trabajo colaborativo consiste en subdividir los grupos en pequeños equipos para que desarrollen las actividades del proyecto. Una vez que el profesor dicta instrucciones o consignas, los estudiantes intercambian información, se organizan, planean y trabajan en esa tarea hasta que todos los miembros han entendido y el proyecto se da por terminado. Todos colaboran, participan y aprenden.
Aunque existen autores que plantean diferencias entre aprendizaje colaborativo, aprendizaje en equipo y aprendizaje cooperativo, los tres conceptos se consideran casi sinónimos, por las sutiles diferencias de enfoque académico entre ellos. Dichas diferencias no son significativas para nuestro propósito.
El aprendizaje a través de proyectos promueve la participación, colaboración e interacción entre los estudiantes, los contenidos y el docente, haciendo de las actividades individuales un conjunto de tareas que posibilitan la construcción personal del aprendizaje con la participación colectiva.
La relación con aspectos de la vida real en los proyectos que se ejecutan en Monclair permite que los alumnos mantengan su motivación, permanezcan interesados en el trabajo y encuentren aplicación y pertinencia a los contenidos que se estudian.
Para que sea viable la relación de los aspectos de la vida real con el aprendizaje de los alumnos se toman en cuenta los Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS), que son lineamientos emitidos por la Organización de las Naciones Unidas para atender los requerimientos de la agenda planteados en los Objetivos del Desarrollo del Milenio.
“Los Objetivos de Desarrollo Sostenible son el plan maestro para conseguir un futuro sostenible para todos. Se interrelacionan entre sí e incorporan los desafíos globales a los que nos enfrentamos día a día, como la pobreza, la desigualdad, el clima, la degradación ambiental, la prosperidad, la paz y la justicia. Para no dejar a nadie atrás, es importante que logremos cumplir con cada uno de estos objetivos para 2030”.²
Asimismo, los eventos nacionales e internacionales y los hechos que marcan la historia contemporánea son fuentes de las narrativas de los proyectos en Monclair, entre ellos:
Día verde, Día Internacional de la Mujer, Día de la Independencia, Día Internacional de los Derechos Humanos, etc.
Otras fuentes para que el contenido de los proyectos esté vinculado con la vida de los alumnos son las necesidades de las colectividades locales y sus intereses.
Los alumnos pueden desarrollar proyectos con base en la detección de las necesidades de las comunidades cercanas a su entorno y, desde esa perspectiva, ofrecer soluciones construidas sea con el manejo de los contenidos académicos y el ejercicio individual y colectivo de sus competencias o sea con acciones colectivas concertadas con los propios beneficiarios.
Con base en este análisis de los proyectos interdisciplinarios, activos, colaborativos y relacionados con aspectos de la vida real que se diseñan y ejecutan en nuestro colegio, queda de manifiesto que los alumnos y sus necesidades están en el centro del quehacer educativo de nuestra comunidad, y así se evidencia que Monclair es un colegio que está a la vanguardia de la innovación y la calidad de la educacion en Mexico.
Emilio Rovelo Meyrán
Responsable del apoyo técnico pedagógico en Monclair
¹El Aprendizaje Basado en Proyectos en PLaNEA. Características, diseño, materiales e implementación. Primera edición, Buenos Aires. © Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) Marzo 2020. Dirección editorial Cora Steinberg, especialista de Educación UNICEF Coordinación General Cecilia Litichever Autores Mariana Martínez, Reimagine Education Lab Xavier Aragay, Reimagine Education Lab Revisión Graciela López López Melina Furman.
² www.un.org/sustainabledevelopment/es/sustainable-development-goals/
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“Plantea como eje central la participación activa de los estudiantes en el proceso de aprendizaje a partir de actividades que involucran la resolución de problemas auténticos que les exigen tomar decisiones, indagar en diversas fuentes y poner en relación diversos contenidos, saberes y lenguajes. La iniciativa busca que los alumnos desarrollen capacidades acordes con el mundo contemporáneo, para lo cual promueve el trabajo en proyectos colaborativos que, además de formarlos intelectualmente, los motivan, los desafían y permiten el desarrollo de habilidades para la vida”.¹
El aspecto interdisciplinario consiste en que las asignaturas no sean bloques de conocimientos aislados entre sí. Cada parte de esos conocimientos se va integrando y se va incorporando al conjunto de conocimientos previos de cada alumno. Esta característica de los proyectos supera la antigua manera de dividir el día en horas, en las que de manera separada las personas “aprendían” algo y llegado el final de cada materia se iniciaba un nuevo procedimiento para aprender otros contenidos que poco o nada tenían que ver con el material anterior.
Los proyectos que ponemos en práctica en Colegio Monclair son activos, debido a que son los alumnos quienes deben ejecutar las tareas, las misiones, los ejercicios necesarios para lograr el aprendizaje.
Aquellos alumnos pasivos que para aprender algo debían escuchar al profesor solamente y luego pasar apuntes y memorizarlos, tienen menos posibilidades de lograr la cantidad y calidad de aprendizajes que los que realizan conjuntos de actividades y desarrollan series de procesos relacionados con el acopio, sistematización y manipulación de datos.
Los proyectos en Monclair plantean series de actividades para que los alumnos participen directamente en ellas, ya sea al obtener, producir, procesar, difundir, contrastar y/o verificar información para resolver problemas, crear soluciones, proponer alternativas de actuación, desde cuestionamientos, planteamiento de problemas, descubrimiento de vacíos o hallazgos. Los estudiantes en los proyectos asumen un rol protagónico en la construcción de su aprendizaje, descubren procesos y producen soluciones adecuadas al contexto del problema.
Las competencias que requieren las personas para ser ciudadanos, para vivir en el mundo actual son adquiridas y ejercitadas en el desarrollo de los proyectos, en cuanto a la socialización y participación activa del sujeto. Esto ocurre en oposición a la sistematización individual, rutinaria de escuchar información emitida por el profesor, para procesarla mediante la repetición y la memorización y, así, eventualmente evocarla y rara vez aplicarla.
La práctica del aprendizaje colaborativo enriquece nuestra concepción del Aprendizaje Basado en Proyectos. La concepción del trabajo colaborativo consiste en subdividir los grupos en pequeños equipos para que desarrollen las actividades del proyecto. Una vez que el profesor dicta instrucciones o consignas, los estudiantes intercambian información, se organizan, planean y trabajan en esa tarea hasta que todos los miembros han entendido y el proyecto se da por terminado. Todos colaboran, participan y aprenden.
Aunque existen autores que plantean diferencias entre aprendizaje colaborativo, aprendizaje en equipo y aprendizaje cooperativo, los tres conceptos se consideran casi sinónimos, por las sutiles diferencias de enfoque académico entre ellos. Dichas diferencias no son significativas para nuestro propósito.
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